Kiciloff delegó las conversaciones del presupuesto bonaerense a su Jefe de Gabinete, Martin Isaurralde.
Esta semana una comitiva que estuvo integrada por legisladores del oficialismo, la vicegobernadora, Verónica Maggario, Martín Insaurralde, intendentes, diputados y senadores de Juntos por el Cambio, conversaron para la aprobación del presupuesto bonaerense 2023, el cual propone un gasto de 7 billones de pesos.
El pedido de los intendentes de la oposición es que ese monto, sea destinado para el Fondo de Infraestructura y para el Fondo de Seguridad, este pedido no es contemplado por el oficialismo.
Kiciloff sigue muy de cerca estas negociaciones, pero la cara visible de las reuniones es el Jefe de Gabinete, Martín Insaurralde, realizando reuniones cada 10 días con el oficialismo y la oposición.
Las negociaciones entre ambos no avanzan, si bien en la reunión del miércoles estuvo presente el ministro de Hacienda y Finanzas Publicas, Pablo López, que había sido un pedido de Juntos, no logran ponerse de acuerdo en los detalles del desembolso de los fondos hacia los municipios.
En el oficialismo por el momento no tienen ningún apuro. La mira esta puesta sobre todo en la Ley Fiscal Impositiva, ya que es una de las herramientas de recaudación central con la que cuenta el gobierno.
Por otra parte, el Jefe de Gabinete se reunirá este lunes con el gobernador para definir la postura y como se distribuirán los montos.
El intendente de La Plata, Julio Garro, fue quien reclamó que los municipios se hacen cargo de los combustibles y arreglos de los patrulleros, que es una tarea que debería hacerse cargo el Gobierno de la Provincia.
El acercamiento podría generarse, con la aprobación del presupuesto, aclararon ambas partes que esto es una negociación, con ofertas y contraofertas.
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