Se estrelló un avión operado por la aerolínea nepalí Yeti Airways sufrió un accidente mortal mientras cubría una ruta doméstica entre Katmandú y Pokhara. El avión, un Bombardier Dash 8 Q400, tenía 72 personas a bordo, incluyendo 68 pasajeros y 4 tripulantes.
Según informes, el avión despegó de Katmandú a las 10.33 hora local y sufrió un accidente al aterrizar en el aeropuerto internacional de Pokhara, en la orilla del río Seti. El avión cayó entre los aeropuertos nuevo y viejo de Pokhara, en el centro de Nepal. El aparato se incendió y cientos de trabajadores se han trasladado rápidamente al lugar para apagar el fuego, según ha indicado Gurudutta Dhakal, un funcionario local.
La cifra de víctimas mortales asciende ya a 68, mientras prosiguen las tareas de búsqueda y rescate, dificultadas al precipitarse el aparato por un barranco el aparato en donde han sido localizados 36 cuerpos, según informaron fuentes policiales a la agencia Dpa. Algunas versiones iniciales indicaron la posibilidad de haber sobrevivientes, sin embargo, las autoridades han informado que hasta el momento no se han encontrado.
Según fuentes aeroportuarias, los pilotos no informaron de ninguna avería antes del accidente. Sin embargo, se investiga si la aeronave sufrió una avería y si esta fue comunicada o no a la torre de control. El Gobierno de Nepal ha declarado una jornada de luto nacional y ha creado un grupo de trabajo para investigar las causas del siniestro.
La cifra de víctimas extranjeras entre los pasajeros asciende a 15, entre ellos cinco ciudadanos de India, cuatro rusos, dos coreanos, un argentino, un australiano, un irlandés y un francés. Además, entre los pasajeros también había seis menores, dos de ellos bebés.
La aerolínea Yeti Airways ha emitido un comunicado expresando su pesar por el accidente y su solidaridad con las familias de las víctimas. La compañía ha suspendido temporalmente sus operaciones mientras se lleva a cabo la investigación del accidente.
La investigación del accidente será liderada por el Ministerio de Aviación Civil de Nepal, con la colaboración de expertos internacionales. Se espera que se analice el estado de la aeronave, los registros de vuelo y las comunicaciones entre la tripulación y la torre de control. También se investigará la posible influencia de factores meteorológicos o humanos en el accidente.
El accidente ha sido un golpe muy duro para la industria de la aviación de Nepal, que ha estado tratando de mejorar su seguridad en los últimos años. La aerolínea Yeti Airways había obtenido recientemente la certificación IATA Operational Safety Audit (IOSA) y estaba en proceso de obtener la certificación de la Unión Europea.
El accidente conmocionó a la nación, por líderes políticos y representantes de la industria de la aviación de todo el mundo. Se espera que las investigaciones determinen las causas del accidente y se tomen medidas para prevenir accidentes similares en el futuro.
