Sigue el conflicto laboral entre el Sindicato Único de Trabajadores de los Peajes y Afines (Sutpa) y la empresa estatal Aubasa, encargada de la concesión de rutas y autopistas en la provincia de Buenos Aires.
La discusión comenzó debido a la falta de acuerdo para evitar despidos mientras se modernizan las cabinas de peaje, pero ha escalado y ha atraído la atención de la familia Moyano e incluso de la CGT (Confederación General del Trabajo).
Desde la CGT decidieron intervenir luego de que Aubasa solicitara la cancelación del estatus legal del sindicato en una audiencia con el Ministerio de Trabajo. La empresa también ha solicitado multas y otras sanciones, incluyendo el inicio de procedimientos legales para la cancelación del estatus legal del sindicato.
Facundo Moyano ha criticado al gobernador de Buenos Aires, Axel Kicillof, por las acciones de la empresa y ha declarado que las exigencias de Aubasa son sin precedentes en la democracia y no están relacionadas con los problemas que se están discutiendo.
El sindicato Sutpa y Aubasa han estado en conflicto laboral durante casi un año debido a la falta de acuerdo sobre un plan de conversión laboral que garantice la seguridad laboral a través del uso de tecnología. Desde el gremio también han acusado a la empresa de no recalificar al personal, incumplir los acuerdos colectivos de trabajo y despedir arbitrariamente a un trabajador encargado del manejo de sistemas que estaba trabajando en una estrategia para proteger a los empleados de los avances tecnológicos.
Los afiliados al Sutpa han respondido a la falta de progreso en las negociaciones con huelgas, incluyendo la creación de barricadas en las cabinas de peaje a lo largo de la costa atlántica, a pesar de la conciliación obligatoria ordenada por la ministra de Trabajo, Kelly Olmos.
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