Juan Grabois, líder del Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE), cerrará hoy su campaña electoral en el estadio Malvinas Argentinas, enfrentándose en las PASO de Unión por la Patria a Sergio Massa. El acto, programado para las 17 horas, lleva la consigna «Votá con el corazón» y promete ser un evento significativo en la carrera presidencial de Grabois.
Un cierre de campaña con expectativas altas
El microestadio cerrado de la Paternal, con capacidad para 6.200 personas, será el escenario donde Juan Grabois cerrará su campaña. Se espera una asistencia mayor, por lo que se instalarán pantallas sobre la calle Gutemberg 350 para acomodar a la multitud. Acompañado por su compañera de fórmula, Paula Abal Medina, y presentado por la legisladora porteña Ofelia Fernández, Grabois resumirá sus propuestas, como «deserción escolar cero» y su plan de seguridad.
Durante la campaña electoral, tanto Massa como Grabois han mantenido un tono respetuoso, evitando críticas personales y enfocándose en las diferencias políticas. Grabois ha expresado su desacuerdo con algunas políticas económicas aplicadas por el jefe del Palacio de Hacienda, como la alta inflación y el nuevo acuerdo con el Fondo Monetario Internacional. «Se firmó un acuerdo malo (con el FMI). Pagamos con yuanes, con lo que podamos rascar de cualquier lado», expresó Grabois, aunque sin llevar la crítica a un nivel personal.
Un llamado a la acción y el compromiso político
El precandidato presidencial del oficialismo también hará un llamado a hacer «una buena elección» para «tener una gran capacidad de condicionar al sistema político». Este mensaje ya lo ha compartido en un encuentro con estudiantes secundarios, terciarios y universitarios en la Facultad de Ciencias Sociales, junto a Ofelia Fernández.
Ante cientos de estudiantes, el militante social planteó: «¿Quién dijo que no vamos a ganar? Si ganamos hackeamos la matrix. Ahora si nosotros hacemos una buena elección, aunque perdamos, vamos a tener una gran capacidad de condicionar al sistema político, a las políticas públicas, incluso las negociaciones viles que se hacen a nivel internacional y es lo que realmente les molesta. Y precisamente por eso tenemos que hacer una muy buena elección, para ponerles un límite», un mensaje que se entiende, está dirigido hacia dentro del espacio que integra.