El presidente, Alberto Fernández, ha aceptado la renuncia del titular de la Oficina Anticorrupción (OA), Félix Crous, que dejará el cargo a partir del 1 de enero de 2023. La decisión se publicó en el Boletín Oficial y firmada por el mandatario y por su jefe de Gabinete, Juan Manzur.
El extitular de la Oficina Anticorrupción asumió el cargo en diciembre de 2019, tras la llegada del Frente de Todos al poder. Era miembro y fundador de la agrupación kirchnerista Justicia Legítima y se desenpeñó como fiscal titular de la Procuraduría de Violencia Institucional (Procuvin), nombrado por la exprocuradora Alejandra Gils Carbó. Durante el gobierno de Mauricio Macri, a Félix Crous lo desplazaron de ese cargo y pasó a integrar la oficina de Enlace Legislativo de la Procuración.
Como titular de la OA, Crous adoptó varias medidas que provocaron polémica. La última fue a mediados de este año, cuando renunció a ser querellante en la causa Vialidad, donde recientemente fue condenada Cristina Kirchner. La otra querella estatal, a cargo de la Unidad de Información Financiera, también se retiró del proceso y la Fiscalía pasó a ser el único acusador que tuvieron los imputados. En aquel momento, se argumentó que «la OA tiene entre sus funciones la prevención de la corrupción y la investigación; su capacidad de litigar fue sobredimensionada durante la gestión de Cambiemos».
El exfuncionario ha defendido públicamente su militancia kirchnerista. En una entrevista concedida a Infobae en 2020, reivindicó su defensa al kirchnerismo pese al rol institucional que ocupaba. También defendió su participación en el programa 6-7-8 durante los gobiernos de CFK, afirmando que «era un programa que tenía una ideología clara, una posición política clara, que defendía las posiciones del gobierno en condiciones de altísima desventaja frente al resto de los medios».
La salida de Crous se suma a otras renuncias registradas en las últimas horas, como las de la titular del Inadi, Victoria Donda, la del titular de la Casa de la Moneda (eyectado del cargo por Sergio Massa) y la de la directora del BCRA, Betina Stein. Se trata de un año convulsionado y con varias salidas en el gobierno de Alberto Fernández.