Mandatarios de diferentes países salieron a expresar por las redes sociales su solidaridad con la vicepresidente, Cristina Fernández, y tildaron las acusaciones de Luciani como “persecución política”.
En el día de ayer el fiscal, Diego Luciani, pidió una pena de 12 años de prisión y la inhabilitación política perpetua para la vicepresidenta Cristina Fernández al acusarla por ser la jefa de una asociación ilícita que favoreció a empresarios como Lázaro Báez con contratos de obra pública en Causa Vialidad. Esto genero un repudio por parte de sus seguidores que señalaron a la fiscalía de llevar adelante una persecución contra la vicepresidenta. A raíz de esto varios mandatarios y funcionarios de izquierda, de América, se sumaron y expresaron sus mensajes de apoyo a través de las redes sociales.
El eje progresista de América Latina, El Grupo de Puebla, fue uno de los primeros en manifestarse y emitir un mensaje de apoyo a la vicepresidente. El actual grupo está liderado por el presidente argentino, Alberto Fernández.
A través de la red social Twitter, el Grupo de Puebla expresó: “la persecución mediática y judicial en contra de la vicepresidenta de Argentina Cristina Fernández de Kirchner” en lo que consideró una jugada por par de “la derecha” por “proscribirla sin permitirle defenderse”. Y agregó: “El lawfare vuelve a operar en América Latina, a costa de nuestras democracias”.

El excandidato presidencial chileno, Marco Enríquez Ominami, diputado actualmente y dirigente de izquierda muy cercano a los Kirchner expresó: “el lawfare vuelve a atacar en Latinoamérica, ahora en Argentina. La misma trama, buscan impedir que Cristina Kirchner se presente en las próximas elecciones. Usan la justicia para sacar de carrera a sus adversarios sin un debido proceso”.
Expresidentes latinoamericanos repudiaron la condena y afirmaron que Cristina Fernández es “víctima de un proceso que es una farsa”.
Ernesto Samper Pizano, expresidente colombiano escribió en su red social: “A Cristina Kirchner le están montado un caso de lawfare, muy parecido al de Lula da Silva”, y continuo: “Movieron con extraña rapidez un proceso judicial que no la vincula, pasando por encima del debido proceso y que busca impedirle presentarse en las próximas elecciones: todo una farsa”.
Dilma Rousseff, la expresidenta de Brasil, también se expresó y afirmó que Cristina es víctima de “persecución política, judicial y mediática”, y se debe a un accionar de “la extrema derecha del continente para prohibir a los líderes que vivan en el corazón del pueblo”.
Evo Morales, expresidente de Bolivia, salió a repudiar la pena pedida por el Fiscal Luciani refiriéndose al mismo como “fiscales que imitan al Juez Moro”, el cual precedió el juicio por el Lava Jato y envió a Lula da Silva a prisión.
Todavía hay algunos líderes de izquierda que aún no han expresado su opinión al respecto. Entre ellos, el mandatario Nicolás Maduro, presidente de Venezuela, Gustavo Petro, actual presidente de Colombia y el presidente de Chile, Gabriel Boric.