La vicepresidente hoy tomó la defensa de su juicio y dijo “Como soy acusada, pero al mismo tiempo abogada puedo actuar en mi defensa, sino hubiese estado en un estado de indefensión total” y advirtió “Esto es un claro caso de prevaricato. Un gobierno elegido por el voto popular no puede ser juzgado por jueces, debe ser juzgado por el Congreso y ya partiendo de esa premisa este juicio debería ser considerado nulo; todo esto es una acusación insólita que raya en lo ridículo; los fiscales mintieron al sostener acusaciones que fueron refutadas por las propias pruebas”.
Continuando con su defensa Cristina Fernández dijo “Para los fiscales el gobierno de Néstor y mis dos mandatos fueron asociaciones ilícitas, es ridículo militamos toda la vida para llegar a la presidencia y hacer 51 contratos de obra Pública, esto no se puede tomar en serio. Vivo en estado de sitio permanente porque mis garantías constitucionales están suspendidas desde el 10 de diciembre de 2015”. Además recordó que jueces y fiscales de este juicio “jugaron al fútbol en la Quinta de Macri, otros iban a jugar con Macri a Olivos”.
Además, habló sobre el atentado que sufrió y dijo que: “Gastón Marano y Brenda Salva, letrados de Gabriel Carrizo, eran asesores de un senador de la Nación que se sienta a veinte metros mío, nadie puede pensar que esa banda no tuvo un actor intelectual detrás, y con todo lo que dijeron los fiscales y lo que dijeron Nación y Clarín, sobre las treinta toneladas de pruebas crearon un clima propicio para que ocurriera lo que pasó”.
Con respecto al presupuesto para adjudicar a Obras Públicas aclaró: “Yo nunca administré el gobierno, solo era la Presidente, la administración está a cargo del Jefe de Gabinete, quien tiene a su cargo el envío del presupuesto al Congreso”. Con respecto a la asociación ilícita remarcó: “Si seguimos la lógica de Luciani llegaríamos al ridículo que él no podría ser fiscal ya que su nombramiento lo firmé yo; la jefa de la asociación ilícita”. La vicepresidente insistió en denunciar “las mentiras, calumnias y difamaciones que formaron parte de su acusación. No se puede creer como se ha llevado este juicio adelante, pido que se extraiga testimonio de todas y cada una de las mentiras de los fiscales”. Beraldi desarmó cada uno de los argumentos presentados por la fiscalía y quedaron a la luz cada una de las arbitrariedades que se cometieron en este juicio.
Cristina Fernández habló por ocho horas, ahora resta esperar la decisión de los jueces.