Desde Casa Rosada afirman que ya están trabajando en el cronograma del proceso electoral 2023 y ya está asignado en el presupuesto.
El gobernador de La Rioja, Ricardo Quintela, contó que se había reunido con el ministro del Interior y le pidió que las PASO se suspendan ya que generaría un gasto innecesario. Al oficialismo le convendría una eventual suspensión porque las PASO suelen ser una herramienta que le sirve a la oposición para ordenar las candidaturas, por eso varios oficialistas provinciales decidieron suspenderlas en las elecciones locales.
Desde la oposición están desesperados para que esto no ocurra porque necesitan ordenar sus propias internas. Mauricio Macri, por ejemplo, ya adelantó que si no hay PASO, harán una interna abierta entre ellos, a costa de los partidos que integran la coalición. Patricia Bullrich expresó que eliminarlas es típico de los sistemas feudales para mantener el poder. San Juan, las sacó, lo mismo pasó en Salta y Chubut, quieren hacer lo mismo.
En el oficialismo hay posturas encontradas, algunos como Leandro Santoro, sostienen que, si la intención es suspenderlas, habría que pensarlo para el 2025, no para el próximo año y sostuvo que: “Si hablamos de paz social y de diálogo político lo peor que podemos hacer es violentar un cambio de las reglas de juego para la próxima elección, eso solo generaría más tensión”.
Mayans sostuvo que las PASO generan “un costo fenomenal y el país hoy no está en condiciones de afrontarlas”. Y sostuvo que “directamente se vaya al sistema anterior y que la decisión del pueblo argentino se vea en las urnas”. Las tribus oficialistas ven complicada su suspensión, sobre todo porque en la provincia de Buenos Aires, madre de todas las batallas, no lograrían el consenso necesario para poder avanzar.
Además, “las PASO siempre fueron positivas, no se puede especular ahora faltando tan poco tiempo”, opinó una diputada oficialista. Mientras tanto hasta que el Congreso se defina, sigue todo igual.