El Ministro de Defensa ruso, afirmó que la “reubicación” de sus tropas en la zona este del río Dnipro ha finalizado.
En su reporte diario, el Ejército ruso comunicó “Hoy a las 05:00 hora de Moscú, se completó la reubicación de las unidades rusas en la orilla este del río Dnipro”. “Todo el personal de servicio ruso fue trasladado, no hubo pérdidas de hombres, hardware o material del grupo de fuerzas rusas”.
Durante el curso de la guerra, Jersón fue la única ciudad importante que Rusia había logrado ocupar, pero el pasado miércoles se anunció que comenzaría la retirada de sus fuerzas de esta ciudad.
Esta decisión ha sido un duro golpe para el ejército ruso frente a la contraofensiva ucraniana. Pero Rusia no considera este retiro un fracaso, afirmaron que fue una decisión del Ministerio de Defensa del país.
En cambio, Kiev describió la operación de Rusia como “El segundo ejército del mundo que huye a pie”.
Una victoria para Ucrania
La retirada rusa supone una gran victoria para Ucrania, ya que ahora podrá liberar nuevos territorios en el sur del país limítrofe con la península de Crimea antes de la llegada del crudo invierno, cuando se espera que las bajas temperaturas dificulten los avances.
En principio, las tropas rusas abandonarían unos 3.800 kilómetros cuadrados, que habría que sumar a los casi 3.000 kilómetros cuadrados que los ucranianos ya controlan en Jersón, un 10 por ciento de la superficie de toda la provincia.
La ocupación de Jersón había sido clave para la estrategia de Rusia, ya que le permitió tener acceso terrestre desde el territorio continental hasta la península de Crimea. Además se pretendía extenderse hacia las ciudades de Odesa y Nikolaiev para logra aislar a Ucrania del mas Negro.
Pero los avances militares de Ucrania han puesto de manifiesto las carencias y la mala preparación del ejército ruso.
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